Son tiempos difíciles para la elección del mejor teléfono
Hace cinco años era muy fácil decidirse por el mejor teléfono posible dentro del Sistema Operativo de tu predilección, pues solamente debías contar con el presupuesto suficiente.
Hoy ésto ya no es así porque la tecnología móvil ha decidido evolucionar en varias direcciones opuestas, dando como resultado que el modelo más caro siempre muestra debilidades en varios campos.
Pueden ofrecerte un teléfono todo pantalla, pero entonces no tendrás una cámara delantera accesible en todo momento. O quizás prefieran colocarte una molesta ceja para albergar cámara y sensores, pero entonces ya nos olvidamos del ideal todo pantalla. También pueden optar por darte el estándar moderno USB tipo C, pero entonces aprovecharán la excusa para quitarte el jack de auriculares. O crear el móvil más fino del mercado que tendrá una batería irrisoria. Incluso algunas compañías apuestan por la innovación en pantallas flexibles, pero entonces no solo se dispara el precio sino también la sensación de fragilidad.
Vamos a hacer un breve repaso de los modelos actuales:
- iPhone XS Max: es la mejor opción si quieres el mejor diseño y potencia, todo empaquetado al gusto con iOS, pero a cambio sufrirás cuando quieras desbloquear el móvil por la noche con su FaceID.
- Google Pixel 3XL: será tu elección predilecta si quieres la mejor cámara del mercado dotada con un uso abrumador de Inteligencia Artificial, pero a la vez estás dispuesto a ceder en diseño con una ceja descomunal que descoloca toda la interfaz.
- Samsung Galaxy S10 Plus: se convierte en la mejor opción cuando buscas el Android más potente del momento con la mejor pantalla y no quieres ceder en detalles como el jack de auriculares, pero debes tener claro que te destrozará su lector de huellas bajo la pantalla.
- Huawei P20 Pro (pronto el P30 Pro): pasa a ser entonces la alternativa natural a Samsung siguiendo su filosofía, con sus espectaculares cámaras, pantalla y rendimiento… pero tendrás que aceptar su todavía exagerada capa EMUI sobre Android.
- Xiaomi Mi Mix 3: parece jugar en otra liga pero es opción ideal cuando quieres un auténtico móvil todo pantalla con una cámara frontal deslizable que parece gustar pero quizás no aguante tres caídas o 1 año de uso intensivo… y, por si eso fuera poco, te tocará cargar su ridícula batería a media tarde.
- One Plus 7: puede plantearse como la alternativa al anterior para evitar la ceja en un precio también contenido, pero te arriesgas todavía más con esa cámara frontal que parece ser tan frágil.
En definitiva, se acabaron esos tiempos en los que cada nuevo teléfono que te comprabas significaba por fuerza una evolución sobre el anterior: cejas o agujeros que limitan la pantalla, ausencia o bajada de calidad en el sensor de huellas, batería con peor duración debido a las exigencias del hardware, eliminación del puerto de 3,5 mm para auriculares…
Sin embargo ésto tampoco debe tomarse como un retroceso sino como síntoma evidente de una madurez bien entendida del mercado móvil. Es gracias precisamente a eso que hoy podemos trabajar con móviles de hace 2 años sin sufrir como hace un lustro.