A las interfaces les falta personalidad
Como dice Marco García, de Marco Creativo, en la actualidad estamos viviendo un serifacidio radical. Los logotipos de muchas marcas están siendo rediseñados para adaptarse a pantallas pequeñas y, como resultado, las tipografías de esos logotipos/imagotipos pasan a perder su característica serifa.
Otra de las modas que están en auge en el mundo informático actual es el del minimalismo cromático: los Sistemas Operativos y sus aplicaciones comienzan a ser compatibles con el modo oscuro. Esto implica que la misma interfaz debe adaptarse tanto a un predominio del color negro como a uno del color blanco. Ante la falta de una paleta de colores amplia que combine bien con ambos modos, muchas de las aplicaciones y webs están perdiendo su clásico toque de color corporativo en la cabecera.
Resumiendo, las modas se cobran una nueva víctima en su afán despersonalizador, las interfaces de usuario. Sistemas Operativos, aplicaciones, webs y sus marcas son cada vez más genéricas. Tanto que, por momentos, cuesta diferenciar el diseño real de una vista simplificada (clásico modo lectura del navegador).